En el contexto de 2 equipos que no venían deslumbrando espectadores con grandes goles y rendimientos, se jugó el Superclásico del fútbol argentino. Boca llegaba mejor tras la victoria 0-2 contra Argentinos y tenía el plus de la localia, por el otro lado, Riber venia de perder como local frente a All Boys en un partido olvidable para los de J.J.
Tras la operación de Baldassi, el encargado de imponer justicia en el duelo del Domingo sería Patricio Loustou que venía de dirigir a Boca la fecha pasada. El "Pato" dió el pitido y comenzó el duelo a matar o morir en el Alberto J. Armando.
Los primeros minutos la pelota se fue volcando para el arco de Luchetti pero sin grandes ocasiones para el elenco de Nuñez. Pasaban los minutos y Riber era dueño y señor de la pelota, mientras que Boca buscaba desequilibrar con la velocidad de Mouche, pero tambien, sin pasar a mayores. Algunas ocasiones por ambos lados serían entretenedores de los hinchas hasta que Carrizo mande al corner un remate de Mouche. Pablo, va, ejecuta el tiro de esquina y pasa algo raro, inesperado por las 60.000 personas presentes en la Bombonera, tras empujar al Pochi Chávez, Juan Pablo Carrizo se tira a rechazar la pelota e inexplicablemente la mete en contra. El partido se ponía 1-0 para los de Falcioni y la moral Riberplatense recibía un golpe muy grnade. No pasó demasiado hasta que tras una pelota metida al área de JP que es rechazada y luego devuelta a la olla, Martin Palermo cabecee por arriba de un dubitativo Carrizo y marque el 2º del Xeneize y escriba, en tan pocos segundos, otro capitulo mas para su pelicula. Boca ganaba 2-0 y seguiría así hasta el final de los 45' minutos y luego hasta los 90' para desatar la locura boquense.
Vuelven los 22 a la cancha y Loustou da por comenzado el segundo tiempo. Tras un primer tiempo en el que los jugadores de Riber reclamaron varias faltas dentro del área, el enojo hacía el colegiado se iba agrandando por varias supuestas malas decisiones del reemplazante de "La Coneja". Este fue otro factor clave para el desarrollo del partido, ya que (a pesar de el error ó no de Loustou), Riber se ponía mas nervioso y a la vez, mas desordenado. Como era de esperar, Boca al tener 2 goles adentro, se jugaría a la contra como consecuencia del pobre juego de Riquelme que luego saldría reemplazado. No pasaría nada mas, a pesar de un tiro libre de Lamela que Luchetti sacaría como pocos, hasta que en el minuto 46', Almeyda pide la pelota para hacer rápido un tiro libre y Clemente le grita algo, lo que causó la furia del "Pelado". Finalmente, los 2 se irían expulsados y cuando Almeyda se metía en el tunel para ir a las duchas, se enfureció con el partido y comenzó a besarse la camiseta mirando a la "12" y puteandola.
No pasa nada más, jugadores e hinchas cantan y bailan al ritmo de "el que no salta, se va a la B" y se cierra un nuevo capitulo en la historia del partido que frena a un país entero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario